Toto Wolff no dejó pasar la oportunidad de lanzar un consejo con tono irónico a McLaren, luego del primer encontronazo en pista entre Lando Norris y Oscar Piastri durante el Gran Premio de Canadá. El jefe de Mercedes conoce de cerca ese tipo de tensiones: en 2016 le tocó lidiar con una explosiva lucha interna entre Lewis Hamilton y Nico Rosberg que terminó con el alemán campeón por apenas cinco puntos.
“He visto esa película”, dijo Wolff sobre el incidente de McLaren. “Yo estuve ahí, como actor principal”, agregó, haciendo referencia a aquella intensa batalla entre sus pilotos. “Es difícil, porque los pilotos están programados para una sola cosa: ganar. Especialmente en la Fórmula 1.”
El austríaco fue claro al señalar que, si McLaren quiere evitar un incendio interno, debe establecer reglas desde el arranque.
“Ese es el truco: dejar bien en claro cómo se va a manejar la situación. Las cosas se complican si el campeonato de constructores está en juego, pero ahora mismo ellos están tan arriba que ni siquiera es tema.”
Wolff también marcó una diferencia clave respecto al drama de 2016: la personalidad de los involucrados.
“Lando y Oscar son muy distintos a Lewis y Nico. Pero igual se necesita una gestión firme. Nosotros aprendimos haciéndolo, y ellos seguramente también lo harán.”
Por ahora, en McLaren todo sigue en tono civilizado. Norris, 22 puntos por detrás de Piastri en el campeonato, asumió rápidamente la culpa por el toque:
“Fue completamente culpa mía. Una estupidez de mi parte. Hice el ridículo y me siento muy mal por defraudar al equipo”, dijo Lando, tanto por radio como en entrevistas posteriores.
“Nuestra regla número uno es no tocarse entre compañeros… y yo rompí esa regla. McLaren es mi familia. Corro para ellos cada semana y quiero dar lo mejor. Hoy fallé, y tengo que pedir disculpas. A Oscar también. Él corrió limpio y no se merecía eso.”
El tiempo dirá si McLaren logra mantener la armonía… o si la película de Toto vuelve a estrenarse.
